Terminada la carretera, a falta de algunos detalles, y hecho el replanteo del puente, con hitos de cemento en los puntos clave de las curvas, medidos con precisión en horizontal y referidos a puntos fijos, pintados en las rocas más estables y todo dispuesto para empezar el puente, se da uno cuenta de que esta obra puede ser un punto esencial que separa la vida profesional en dos partes. (...) Marca el puente un hito en la historia de mi profesión. Ya tengo ofrecimiento de algunos señores de cierta categoría que se ofrecen para asociarse conmigo, poniendo ellos incluso todo el capital y a los cuales les voy dando tiempo. Finalmente, cuando D.J. decide retirarse, y así me lo manifiesta, es cuando empiezo las negociaciones con D.N.P., que fue mi primer socio. (...) Y así es como se construyó ese puente, que más tarde había de ser admirado por D.J.S., ingeniero de la Diputación de Cádiz, y sus dos ayudantes, cuando tenía el herraje del tablero para hormigonar. Tanto le gustaron los detalles y la magnificencia de aquella obra que me invitaron para que me fuera a trabajar con ellos, que les hacía falta un contratista así, según dijeron entonces. Resultó cierto, porque desde entonces no me ha faltado el trabajo en aquella provincia. Muchas veces he pensado que esta es la única obra que he construido en mi vida. Por su importancia y peligro, así como por tener menos trabajo en el periodo de su construcción, es la que he llevado directamente sin tener siquiera una persona que pudiera colaborar técnicamente y con práctica. Puente de Coripe CARRETERA DE COR I PE A ALGODONALES #3 1 9 2 7/ 1 9 3 0 ← Prueba de carga del Puente de Coripe, 1930. Archivo de la compañía 1 9 7 1 1 9 8 1 1 9 9 1 2 0 0 1 2 0 1 1 2 0 2 1
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